El intendente Ricardo Ramírez y el Secretario institucional, Francisco Avalo, llegaron a Casa de Gobierno para presentar cuatro proyectos sobre obras para la ciudad: asfalto para Bv. Oroño entre el Hospital y General López, refuncionalización de calle San Martín (se había presentado en Nación), veredas y luces LED para López y Planes (primer Plan Incluir) y cordón cuneta para parte de barrio Policial.
El primer mandatario y una de sus manos derechas de su gestión llegaron a la Capital provincial casi al unísono en que terminaba la primera reunión de gabinete de Maximiliano Pullaro. Subieron al primer piso de Casa de Gobierno y pudieron mantener diversas reuniones.
Algunos de los proyectos ya se habían elevado a la Nación, pero ante la difícil situación que se afronta en ese contexto con promesas de recortes, incluso, se teme que no podrían salir a pesar de haber sido aprobados.
Otros son promesas incumplidas por las gestiones anteriores, como la del asfalto frente al nuevo edificio del Hospital, que estuvo en carpeta como «obras complementarias» a la Cárcel Federal, primero; y como parte de la construcción del moderno efector, luego.
Por otra parte, al intendente le preocupa sobremanera, al igual que al gobernador, darle solución al mantenimiento de las rutas que cruzan la ciudad. Por un lado, la traza urbana que se necesita para la ruta 11, como también la intersección con el Acceso a la Autopista por la cual se viene pidiendo una solución hace años sin mayores éxitos.