El intendente municipal en compañía de la reina nacional de la Frutilla electa, Valentina Chamorro, sus Secretarias de Hacienda y Producción, Rocío Zanón y Belén Sierra y el Sub Secretario de Turismo, Ezequiel Ridolfi, trazaron una balance de la última edición de la Fiesta Nacional.
Por un lado hubo unas palabras para la organización y las polémicas y por otro lo estrictamente económico que fue muy favorable. Así se dio a conocer un superávit de 543.093 pesos que servirán para cubrir algún déficit anterior y para preparar la nueva edición.
«Cuando asumimos el 10 de diciembre el sueño era organizarla de manera presencial en el Palco pero las circunstancias nos hicieron cambiar, En una reunión le comuniqué al gabinete que la Fiesta se tenía que hacer, un poco en reconocimiento a los productores, familias e industrias que trabajan. Ahí empezamos un camino que era nuevo para nosotros. Sabíamos que podíamos tener algunos errores» reconoció el primer mandatario.
«Las personas que hacen siempre se pueden equivocar pero estoy orgulloso de la gente que estuvo trabajando, que no fueron pocos. Dejaron todo de sí porque creo que el evento desde todos los que participaron salió hermoso. Tuvimos muchísimos llamados y eso marcó una realidad que nos hace ser agradecidos» agregó Ramírez.
«Las cosas se fueron dando, se firmó un acta de confidencialidad porque había cosas que se tenían que guardar para entregar el material el día miércoles antes de la Fiesta. Lamentablemente todo se fue empañando con algunas situaciones producto de que alguien de adentro dio una información. Esto le hace mal a la Fiesta y a la ciudad, se creó un Facebook trucho y empezaron a hablar con las postulantes, hasta hoy lo están haciendo» explicó el intendente.
Más adelante se contó que el primer mandatario tuvo una videollamada con las dos princesas de la Fiesta que van a llegar las próximas semanas a la ciudad para recorrer Coronda y mantener contacto con los medios de comunicación.