La Agencia de Investigación Criminal (AIC), del Ministerio de Seguridad provincial desarticulo una banda de estafadores que operaba desde Córdoba y Rosario. La investigación se inició a raíz de varias denuncias por estafas telefónicas realizados por ciudadanos de Esperanza y otras localidades del departamento Las Colonias, un total de veinte (20) victimas.
Personal de la AIC abocado a la investigación de los ilícitos, pudo comprobar con el transcurso del tiempo que se trataba de una Asociación Ilícita integrada por cinco internos del Establecimiento Penitenciario N° 6 de la Ciudad de Rio cuarto, quienes contaban con personas (familiares y amigos) encargados de recolectar, teléfonos, cuentas bancarias CBU y distribución del dinero obtenido de las estafas realizadas.
A través de diversas técnicas de investigación, los agentes concretaron operativos en ciudades como ROSARIO (Pcia. Santa Fe), ciudades de la Provincia de Córdoba (La Carlota, Alta Gracia, Rio Cuarto, Córdoba Capital).
En los allanamientos los investigadores detuvieron a 17 personas y secuestraron: 46 TELEFONOS CELULARES, 03 NOTEBOOK , 01 TABLET , 10 de OTROS DISPOSITIVOS, $317.000 pesos, 06 ARMAS DE FUEGO, 138 MUNICIONES , TIKETS DE OPERACIONES BANCARIAS, TARJETAS DE CREDITO Y DOCUMENTACION DE INTERES PARA LA CAUSA.
Los 17 detenidos fueron trasladados a la ciudad de Esperanza (09) mujeres y (08) varones, para su alojamiento e imputaciones y posterior audiencias respectivas en Tribunales de la ciudad de Santa Fe.
FISCALÍA INTERVINIENTE: M.P.A. UNIDAD FISCAL NRO. 152 LAS COLONIAS DR. ALEJANDRO BENITEZ.
La modalidad consistía en captar a sus personas por publicaciones de Facebook (MARKETPLACE) que vendían vehículos, motocicletas, o bines muebles mostrando interés en el elemento publicado.
Las victimas recibían llamados telefónicos por parte de una persona que manifestaban interés en la compra del producto, simulando el pago mediante transferencia bancaria, luego le manifiestan que hubo inconvenientes en la misma, por lo que le solicitaban que se dirija a un cajero automático, y bajo engaño realizaban operaciones bancarias donde solicitaban prestamos y lo retransfieren a otras cuentas de diferentes bancos ya preexistentes, asimismo retirando todo dinero que poseen en sus cuentas.
Teniendo en cuenta la gran cantidad de víctimas en su total, fueron estafas por la suma de $ 2.000.000 y US$ 5.000 dólares estadounidense.