
A comienzos de este fin de semana largo se dieron una serie de hechos lamentables que tienen que ver con la falta de empatía con el prójimo y el desinterés por la «cosa pública».
Por un lado al padre Gastón, uno de los curas de la Parroquia San Jerónimo, le chocaron el auto en la Plaza Urquiza (estaba estacionado) y quién le produjo daños en su vehículo se dio a la fuga.
Inmediatamente por las redes sociales comenzó a circular un audio del damnificado que pedía «por favor su alguien sabía del hecho que se comuniquen para poder dar con el responsable». En el abollón que produjeron se puede apreciar algo de pintura roja por lo que se infiere que el vehículo que colisonó tenía ese color.
Por otro lado se dieron otros episodios, pero en esos casos de vandalismo. Por un lado arrancaron dos pizas de la escultura emplazada en la Plazoleta que homenajea a los Héroes de Malvinas.


El concejal Avalo manifestó su malestar ante lo acontecido: «Hoy en nuestra ciudad vemos hechos y actitudes que repudiamos. El auto del Padre Gastón con un choque y el autor del hecho hasta el momento no aparece. Por otro lado, nuevamente el vandalismo deja sin funcionamiento un inflador público de bicicletas ubicado en Av. Costanera, y se suma a un acto inexplicable, cargado de una gran falta de respeto a nuestro Héroe Cap. Rubén Márquez y todos los Héroes de Guerra de Malvinas» escribió el edil
«Como sociedad no debemos bajar los brazos. Hay que continuar mejorando cada espacio público de la ciudad, para el uso y disfrute de todas las familias. Somos una inmensa mayoría que deseamos y trabajamos para lograr una ciudad mejor para vivir» agregó.
Por otro lado también hubo daños en los infladores que gestionó el concejal Matías Zurawski junto al senador Leo Diana dentro de la agrupación «Fuerza Joven». No es la primera vez que elementos que se consiguen para mejorar la vida cotidiana de los corondinos terminan en manos de inescrupulosos que sólo buscar dañar y generar atraso.
