El humor social baila al ritmo de los mosquitos

La provincia recomienda no controlar el Aedes Aegypti con fumigación. Pero la invasión que vive la ciudad y la región no es de esa especie.

Coronda está viviendo una de las temporadas turísticas más exitosas de los últimos años, incluso a pesar de las restricciones por la pandemia. Las playas presentan cada fin de semana un número muy considerable de visitantes pero un «cisne negro» irrumpió en el verano 2021: los mosquitos.

Según funcionarios provinciales «con las altas temperaturas, precitaciones y mayor humedad, aumenta la cantidad de mosquitos. Se produce una eclosión mayor. Es como una oleada».

Incluso aclaran que «es importante saber que la fumigación se hace para bajar la cantidad de mosquitos. Es importante la utilización de repelente y aclarar que la fumigación no tiene nada que ver con el combate del mosquito del dengue; el Aedes aegypti es un mosquito interno de las casas, no está en la vía publica, no es el que nos molesta. Son dos mosquitos diferentes».

El problema no sólo radica en la innumerable cantidad de quejas de los propios corondinos sobre la situación de los barrios sino que también es un tema que afecta a los propios visitantes.

De igual manera, cabe aclarar, que no es un tema exclusivo de Coronda: toda la zona costera y hasta en Buenos Aires lo están sufriendo. Basta con pisar el pasto para comprobarlo.

El Municipio, a través del intendente y de algunos funcionarios, aclararon en la semana que se comenzará a fumigar pero sólo en algunos lugares puntuales como plazas o espacios públicos. ¿Alcanzará?