Luego de que un agente penitenciario denunciara públicamente actos de corrupción que anidan en las cárceles de la provincia, el secretario del Servicio Penitenciario (SP), Walter Gálvez, señaló en Radiópolis Weekend (Radio 2) que inició actuaciones administrativas y se puso a disposición del Ministerio Público de la Acusación (MPA) para que investigue las denuncias del empleado que, según indicó, se encuentra amenazado.
Además, habló de los resultados que comienzan a darse con el nuevo “cinturón de seguridad” implementado en los penales para requisar objetos y la consecuente tensión que genera en la población carcelaria. También, anunció que en las próximas semanas el penal de Piñero será “inhibido totalmente” en las comunicaciones gracias a una tecnología israelí pronta a implementarse.
Gálvez se hizo eco de las graves acusaciones que realizara en la prensa el agente Gonzalo Arellano que, entre otras cuestiones, denunció la existencia de corrupción, tráfico de drogas y celulares y hostigamiento hacia internos y personal en las cárceles de Santa Fe.
“Tomé dos acciones a partir de las declaraciones de Arellano. Iniciamos las acciones administrativas de rigor para desagregar cada denuncia e iniciar una actuación. Y me presenté ante el fiscal (José Luis) Caterina para poner a todo el SP a disposición para que todo esto se pueda aclarar”.
Según el funcionario provincial, el agente Arellano “habla de una situación que data de septiembre de 2020 hacia atrás”, ya que desde entonces “está con licencia psiquiátrica”. E indicó que “para su tranquilidad”, Arellano va a ser trasladado a una comisión del Patronato de Liberados en una oficina administrativa”.
“Los salarios no son buenos –admitió el secretario– el que recién ingresa está alrededor de 200 mil pesos”. Y dijo que a partir del lunes serán incorporados 300 agentes nuevos, ya que la situación de sobrepoblación “así lo amerita”.
“Hay que reestructurar totalmente de manera interdireccional la situación penitenciaria en el país”, admitió el funcionario. Y fue más allá, al indicar que, a su juicio, el sistema elaborado y concretado a partir de nuevas leyes procesales penales (nuevo sistema penal implementado desde 2014) no condice con las estructuras que históricamente tuvo el SP”.
Resultados y anuncios
El secretario del SP destacó que “desde marzo se implementaron en las cárceles de la provincia tres cinturones de seguridad en el ingreso –el escáner corporal (body scan), cinta transportadora y el arco detector de metales–“. Y que en un mes y medio de trabajo “los resultados son sorprendentes y ocasionan un nivel de tensión en el playón exterior y en el pabellón muy importante, porque el interno espera la droga y el celular”.
En ese sentido, indicó que “es elocuente” todo lo que se transportaba en el cuerpo humano: profilácticos llenos de pastillas, balas, llaves universales y celulares. “Evidentemente, la requisa manual es permeable y genera corrupción”, razonó el funcionario.
Según sus números, gracias a las nuevas medidas de seguridad “ha bajado a más de la mitad las requisas ordenadas por los fiscales. Es decir, que hay menos líneas de investigación desde las cárceles”.
Además, Gálvez dijo que está pronta la tan anunciada inhibición de las comunicaciones de la cárcel de Piñero gracias a la tecnología full jamming –oriunda de Israel–, que actualmente se encuentra en la Aduana y debe nacionalizarse.
“Son diez antenas de última generación que no existen en el país. Va a traer consecuencias”, adelantó.
En ese marco, dijo que la cárcel se está adecuando para que esta tecnología pueda ser implementada para que no perturbe la conexión de las salas de audiencias judiciales y la comunicación interna.
Fuente: Rosario3