¿Qué pasó con las denuncias contra un vicario que pasó por Coronda?

El cura párroco Sergio Capocetti brindó declaraciones y explicó qué pasó con una serie de denuncias contra un vicario que pasó por nuestra ciudad. La Iglesia había dado a conocer una medida para permitir que se investigue qué sucedió.

El Arzobispo había comunicado que «se ha decidido prohibir el ejercicio de cualquier oficio en esta arquidiócesis al Pbro. Gastón Gabriel Ríos, indicándole como lugar de residencia el domicilio de su familia, mientras se lleva adelante la correspondiente investigación preliminar según lo establecido en el canon 1717».

Desde la Parroquia de Coronda confirmaron que tanto en nuestra ciudad como en Santa Fe hubo distintos tipos de denuncias por supuesto acoso, especialmente telefónico a mujeres mayores de edad.

«Nosotros recibimos el comunicado el jueves. Era para los sacerdotes y llegó a los medios. Es algo serio y lo venimos sufriendo mucho desde octubre en la Parroquia. Estas cosas tienen que ir a los ámbitos que corresponden. Las primeras denuncias fueron a modo de comentarios y yo inmediatamente me comuniqué con el obispo para saber qué pasos tenía que dar. Nunca me pasó en mi vida esto» dijo el padre Sergio Capocetti.

«Luego surgió en otro lado una denuncia similar pero escrita y firmada. Se hizo un procedimiento y se le hizo una amonestación tras una investigación canónica. En ese momento, que fue a principios de diciembre, lo retiran de aquí para que esté en la casa por unos dos meses. Ya tenía un destino y fue ahí cuando comienzan a venir varias mujeres a dialogar conmigo. Ninguna se animó a firmar, aunque sí contaron qué pasó. Yo tuve que informar con lo que me decían. No se trataban de secretos sacramentales, pero informé con iniciales de las personas» agregó Capocetti.

«A él lo tenemos que proteger para que se haga justicia. La Iglesia tiene lo que se llama justicia canónica y ellos deben investigar, lo que faltaría la denuncia firmada. En el Arzobispado tenemos una comisión para trabajar sobre este tipo de denuncias y está compuesta por dos curas y dos mujeres no religiosas (psicóloga y psiquiatra)» finalizó el cura párroco de la ciudad.