Profesores de educación física y responsables de gimnasios de la ciudad enviaron una nota al Comité de Emergencia de la ciudad para que «se evalúe un cambio en las restricciones por edades para realizar prácticas deportivas, que en nuestra ciudad solo habilita a mayores de 12 años».
En la nota dicen que «hacemos llegar esta petición porque necesitamos que tomen conocimiento que en los gimnasios, centros deportivos de nuestra ciudad, donde, se cumplen los protocolos establecidos por el ministerio de salud en todo este tiempo no hemos tenido contagio alguno».
«Solicitamos la habilitación para los niños desde los 8 años a realizar actividades en dichos establecimientos, ya sean clubes, natatorios, gimnasios, centros de actividades físicas, escuelas de danzas, etc» continúan.
Además los profesionales explicaron que «está comprobado que desde esa edad pueden entender y cumplir los protocolos de distancia social e higiene personal (lavado de manos, uso de tapabocas, desinfección personal y de elementos). Nosotros como profesores y docentes consideramos que los niños tienen derechos enmarcados en los tratados internacionales y en nuestra constitución, y que es nuestra ley primera la ley de derechos del niño. El derecho a la integridad física y psíquica y el derecho a la salud».
Además prosiguen diciendo que «la actividad física es indispensable para la salud, y los niños en estos siete meses de pandemia son los únicos que no tuvieron acceso a estas actividades, siendo, el grupo de menor riesgo ante el virus, y que, además, está comprobado que ellos tampoco son los propagadores del mismo. Cumpliendo dichos protocolos no hay contagios».
Esta solicitud que elevaron surge no solo a inquietud propia como profesores, sino también de padres que se comunican a diario con los profesores planteando la «preocupación al respecto, viendo los perjuicios que sus hijos tienen y tendrán a futuro por no poder realizar actividad física durante tanto tiempo. Hemos tenido charlas con pediatras que son los especialistas en el tema y respaldan nuestra petición. Esta nueva forma de vida tiene que incluir a los niños de forma urgente y no se puede supeditar su inicio a algo tan incierto y lejano como una vacuna que aún no existe».