Tal cual ocurre en diferentes localidades de la cuenca del Paraná, la bajante del río influye de manera directa en la calidad del agua potable que los habitantes de esta zona consumimos. Así se registra una variación a raíz del incremento de la salinidad que es consecuencia directa de la bajante del nivel hidrológico.
Las quejas de los usuarios no se hicieron esperar, especialmente por las redes sociales. Incluso llevó a que la concejala Verónica Taggiasco «tomara el guante» y se reuniera en la mañana de hoy en la sede de la Cooperativa de Servicios Coronda Limitada.
Jorge Bortolozzi, titular de Coserco dijo en declaraciones a Veo Noticias que «creemos que no vamos a tener inconvenientes en la potabilización ni en el suministro pero el nivel de sal que tiene el agua es tremenda, en el sabor es muy fuerte y eso lo reconocemos. Vamos a derivar al Concejo y al Municipio una explicación con los análisis pertinente».
«Este gusto va a seguir por un tiempo. Los productos químicos se duplican o hasta llegan a un 60% más. Es un costo que lo podemos incorporar en la tarifa pero significa un dinero más. Uno que es tomador de mates también se da cuenta que el saber es distinto. La recomendación que pide el ENRESS es cuidar el recurso, cuidar el agua. La gente lo puede ver como una contradicción pero no hay que derrochar» agregó Bortolozzi.
Por su parte, la empresa Masterquín remitió al Concejo Deliberante el último análisis realizado y a continuación se detalla:
